Planificar el futuro hoy es una de las mejores decisiones que puede tomar una persona en ruta a su jubilación. Sin importar si se trata de una pareja o una persona soltera, los beneficios que la planificación financiera puede traer a largo plazo son muchísimos.
A futuro, pueden existir diversos objetivos, según las necesidades de las personas. Uno de esos objetivos puede ser contar con un dinero ahorrado tras la jubilación. Ya sea para uso de disfrute o gastos diarios, este dinero puede servir como base sólida para continuar con una vida financiera saludable.
Otra de las metas de muchas personas radica en la jubilación sin deudas. Sin embargo, existe una falsa idea de que no es un objetivo que pueda lograrse. ¿Adivina? ¡Ahorrarse sin deudas es posible!
Con esto en mente, hemos creado una guía para ayudarte en tu meta de retirarte sin pensar en deudas:
#1 Crea un presupuesto
Existe una regla básica de una salud financiera exitosa: no gastes lo que no tienes. Hacer un presupuesto te ayudará a mantenerte en unos gastos que puedas pagar y no sobregirarte. Un buen ejercicio es hacer la suma de los gastos de las utilidades y necesidades prioritarias y compararlo con lo que estás ingresando a tu cuenta. ¿Hay diferencias? Debes atenderlas lo antes posible para evitar futuras complicaciones.
#2 Planifica a largo plazo
Al ejercicio del presupuesto, súmale el beneficio de la planificación a largo plazo. ¿Qué queremos decir? Que visualices cuánto dinero necesitarás a futuro para trabajar con tus gastos e ir contemplando el saldo de deudas mientras trabajas. Hazte estas preguntas: ¿Cuántos meses necesito para saldar esta deuda? ¿Cuánto dinero tengo ahora? ¿Cuánto dinero tendré después?
#3 Usa herramientas financieras que apoyen tus metas, como una IRA
Si piensas con anticipación, puedes planificarte. Por ejemplo, contempla abrir una cuenta IRA que te ayude a tener dinero al retirarte. Las opciones de IRA son varias y también las inversiones y los plazos de tiempo de cada una. Asesórate y toma la decisión ya para que puedas tener un dinero en el futuro que sea la respuesta a esas deudas que tienes.
#4 Despídete de las tarjetas de crédito
Empieza a cortar el uso de las tarjetas de crédito a la misma vez que vas contemplando el saldo de la deuda que tengas con ella. Si la usas, paga inmediatamente el gasto que hayas hecho con ella para que no se perjudique tu crédito. Tampoco cuentes con ella durante tu jubilación. ¡Libérate!
#5 Aprovecha los beneficios que trae la edad
Con los añitos llegan beneficios para los mayores de ciertas edades. Por ejemplo, descuentos a personas mayores de 55, 60 o 65 años. Vive con orgullo tu sabiduría y experiencia y aprovecha estas oportunidades para ahorrar en áreas como salud y entretenimiento, entre otras.
Ya tienes una idea de algunas de las decisiones que puedes tomar desde ahora para impactar positivamente tu salud financiera en el futuro. ¡Feliz jubilación sin deudas!